Desde el pasado domingo 26 de abril, los niños pueden salir a la calle según las indicaciones del Gobierno. Aunque la mayoría ha acogido con ilusión esta noticia, hay algunos niños que prefieren quedarse en casa. ¿Qué podemos hacer?
Miles de niños salieron a la calle este domingo a disfrutar de su merecido paseo al aire libre, después de 6 semanas de confinamiento. Pero hubo algunos que prefirieron quedarse en casa por miedo al coronavirus.
Lo primero que hay que hacer es normalizar y validar ese miedo. No se debe quitar importancia a este sentimiento. Durante seis semanas han estado escuchando noticias en la televisión, y conversaciones de los padres sobre un virus peligroso que no les deja salir a la calle. En este momento los niños necesitan expresar sus sentimientos, y que sean escuchados por sus progenitores. Es bueno que entiendan que tener miedo no es malo, y que los mayores también tenemos miedo en ciertas ocasiones. Lo importante es que aprendan a gestionarlo de la mejor manera posible.
Por otro lado, cada niño tiene un ritmo de adaptación diferente, por lo que no hay que forzar si no quiere salir a la calle. Se pueden proponer salidas graduales tanto en distancia como en tiempo para que se sientan seguros. Y si un día no quiere salir, no juzgarle por ello, explicarle que no es obligatorio y ofrecerle la posibilidad de salir otro día si él quiere.
También es importante dar la información adecuada para cada edad y la que ellos necesiten. Hay niños que están siempre haciendo preguntas y otros que se conforman con pocas respuestas. No hay que dar más información de la cuenta, ya que muchos datos no los van a entender y eso les puede producir más estrés.
Lo más seguro es que, gestionando de manera adecuada este miedo, el niño poco a poco quiera salir. Pero si siguen pasando los días y este miedo interfiere en su normalidad, sería necesario pedir ayuda a un profesional. Desde el Gabinete Spiral estamos a vuestra disposición para cualquier duda que nos queráis consultar.