Tener una cena en familia tiene numerosas ventajas. Además de los beneficios a nivel nutricional, se ha comprobado en numerosas investigaciones que compartir este tiempo con los tuyos mejora las cualidades necesarias para un buen desarrollo tanto en niños
El tiempo que los padres pasan con sus hijos en la actualidad es, en muchas ocasiones, escaso, debido al frenético ritmo de vida que llevan. La cena es un buen momento para compartir las experiencias del día y fortalecer el vínculo entre los miembros de la familia. Cientos de investigaciones respaldan el hecho de que compartir tiempo a la hora de cenar supone numerosos beneficios, tanto para los niños como para los adolescentes.
En este caso nos vamos a centrar en los niños menores de 5 años.
Se ha comprobado que el vocabulario de los más pequeños de la casa es mayor si durante las cenas padres e hijos conversan entre ellos. La conversación durante la cena aumenta el vocabulario aún más que el hecho de que se les lea en voz alta. En investigaciones llevadas a cabo se encontró que los niños pequeños aprendieron 1.000 palabras raras -las que no se encuentran entre la lista de las 3000 palabras más comunes- durante la cena, frente a las 143 que aprendieron niños cuyos padres leían libros en voz alta con sus hijos. Es destacable la importancia de estas investigaciones si tenemos en cuenta que el vocabulario es un elemento básico para desarrollar un lenguaje adecuado, además de facilitar la lectura.
Por otro lado, estos niños tendrán menos tendencia al sobrepeso cuando se hagan mayores. Aunque para que esto se haga efectivo en el futuro, las cenas familiares no pueden estar acompañadas por la televisión. En un estudio llevado a cabo en EEUU se comprobó que los niños pequeños que miraban la televisión durante la cena tenían más probabilidades de tener sobrepeso de mayores. Los resultados de dicho estudio fueron comprobados por otros estudios que se han realizado en países como Suecia, Finlandia y Portugal.
También se ha evidenciado que los padres que comparten la cena con sus hijos están más satisfechos con sus relaciones de pareja.